Culiacán, Sinaloa.- La historia de Kendra Verduzco Sánchez es inspiradora por donde se vea. A su corta edad, apenas 16 años, su creación innovadora en terrenos de la salud que ha bautizado como ‘Quito-Skin’ la ha llevado a competir en países como Colombia, Perú y recientemente Túnez, donde fue merecedora de una medalla de oro.
En charla con Adiscusión Diario, todavía emocionada narra que a la primera que le llamó, cuando obtuvo esa medalla, fue a su mamá quien lloró de la emoción tras compartirle que con su proyecto se colocó en el ‘Top 10’ mundial dentro del Festival Internacional de Ciencia de la Ingeniería y Tecnología del Túnez, África.
La joven originaria de Guamúchil, pero que decidió con el apoyo de sus padres migrar a Culiacán para seguir estudiando preparatoria, en la UAS, y aspirar a tener estudios profesionales en áreas de la salud pero sobre todo perfeccionar su proyecto, dice con humildad que ‘todavía me falta pero ahí va’ pues su meta está más arriba.
Sus planes, cuenta, es comercializar el producto que tiene que ver con ayudar a la rápida cicatrización de heridas en la piel y generar un impacto positivo en el mundo.
Y cuando se le pregunta qué decirle a los jóvenes que como ella tienen sueños, les pide que ‘si tienes un sueño, arriésgate y lo puedes cumplir’.
Entrevistada en las instalaciones de la preparatoria ‘Emiliano Zapata’ de la Universidad Autónoma de Sinaloa, a donde decidió incorporarse para poder llevar a cabo su investigación, ilustra en qué consiste su proyecto y cómo fue que lo ideó, inspirada en su papá de oficio mecánico y quien por la naturaleza de su trabajo, sufre lesiones en la piel.
Kendra explica que ‘Quito-Skin’ se trata de un gel que asemeja a una piel artificial, la cual es creada a partir de polímeros naturales extraídos de residuos orgánicos, los cuales son normalmente desechados, pero los utiliza para acelerar el proceso de cicatrización que la piel, para que las heridas puedan sanar con mayor rapidez.
— ‘Quito-Skin’ ¿Cómo surgió? ¿De dónde se te ocurrió?
—Todo inicia a mediados del año 2022 cuando yo me encontraba cursando tercer año de secundaria y una maestra llamada Clara Grisel Vizcarra López, la cual es mi actual asesora, me invitó a concursar en los proyectos de ciencia debido a que ella veía que yo tenía cierta chispa en este tipo de ideas innovadoras y de creaciones para fomentar el mundo. Yo tenía que escoger un proyecto, y escogí este dirigido hacia la área de medicina y salud porque siempre me ha interesado y específicamente para cicatrizar heridas porque mi papá es mecánico. Mi papá casi todos los días sufre de cierto tipo de heridas o quemaduras debido a su trabajo con carros y fierros pues sumamente calientes. Y me daba cuenta que él no tenía cierto tratamiento adecuado para seguir trabajando, por lo cual sufría. Fue ahí que me di a la tarea de investigar y de crear este proyecto innovador.
Fue en marzo pasado que la joven estudiante participó con su proyecto en Túnez, en la Feria Internacional de Ciencia de la Ingeniería y Tecnología, donde quedó entre los primeros 10 lugares, compitiendo con estudiantes universitarios de todo el mundo.
—¿Qué representó el haber podido ir a concursar tan lejos?
—Cierto tipo de orgullo. Representar a México en una feria tan prestigiosa como la que fui, a la I-Fest, un sumo orgullo para mí como persona.
—¿Cómo te sentiste estando allá? ¿Estabas nerviosa, emocionada?
—Un poco porque todo allá es en un idioma diferente. Siento que yo me expreso bien al explicar mi proyecto porque yo lo creé. Pero ya hablando de otro idioma sentí un poco de nervios.
—¿Era complicado?
—Sí, un poquito.
—¿Pero pudiste?
—Pero se pudo, se logró.
—Cuando ganaste, cuando te dieron la medalla de oro, ¿qué sentiste? ¿Cuál fue tu primer pensamiento?
—Los resultados del Top 10 se dieron una noche antes del evento de la clausura, de la premiación. Y al ver el ID de mi proyecto ahí junto a los ‘Top 10’ fue de suma emoción para mí. Fue totalmente increíble y ver, decirle a mi mamá, ella lloró por mí, fue sumamente increíble la verdad. Una experiencia muy enriquecedora.
Kendra comparte que al participar en estas ferias y ganar premios tan prestigiados, se ha encontrado con que su proyecto se trata de un tema que llama mucho la atención y a las personas les parece innovador, por lo que sus planes y metas son comercializar el producto y generar un impacto positivo en el mundo.
Recuerda que al ser prácticamente todos proyectos contra los que competía de nivel universitario, le hacía sentir muy entusiasmada ser la más pequeña al menos de la delegación mexicana, pero fu la única del país cuyo proyecto logró entrar al ‘Top 10’.
Narra cómo es que decidió dejar la ciudad de Guamúchil, salir de su casa y quedarse en la capital, para poder estudiar y tener cercanos los espacios de trabajo, como lo son laboratorios de la propia Facultad de Química de la UAS para desarrollar su proyecto.
—Todos los jóvenes tienen sueños. ¿Cuál es el sueño de Kendra?
—Siempre me ha gustado mucho el tema del área de la farmacéutica relacionada a la piel. Pretendo estudiar una carrera derivada para crear productos cosmetológicos, ya sea como el ‘skin care’, maquillaje, que puedan funcionar, no perjudicar a las mujeres y también a los hombres, claro.
—¿Tú mensaje a todos estos jóvenes que tienen talento pero les dan el miedo?
—Me considero una persona tímida, pero estar trabajando en esto de la autoconfianza y la suficiencia, es algo difícil, complicado, pero ciertamente todos podemos. Yo pretendo dar como mensaje que si tienes un sueño, arriésgate y lo puedes cumplir.
Kendra Verduzco Sánchez se dice orgullosa de sus orígenes y de ahora estar participando en competencias de talla mundial, pero que lo que le gusta aún más, es que sus padres se sientan orgullosos de su largo recorrido, habiendo trabajado en proyectos innovadores desde el 2022… y ya se prepara para ir a Brasil en septiembre próximo.
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